Una publicación oficial del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) divulgó un informe anual, conocido como TR10, en el que presenta las mejores tecnologías emergentes del año. En 2014 se habla de drones, de impresión 3D, de robots o de smartphones ultraprivados, entre otras tendencias. Y parece que esas serán, precisamente, los temas que más cambios provocarán en el ámbito científico y en el de la vida cotidiana.
Según explica el director de la publicación del MIT, Jason Pontin, este informe saca a la luz las diez tecnologías que traerán “nuevas tendencias innovadoras” en las que “cada avance es la solución a un problema antiguo” y que, en algunos casos, “ha aparecido tras décadas de frustración”.
Drones agricultores. Son una de las innovaciones destacadas porque, según destacan los expertos, permiten aumentar la producción de las cosechas sin provocar daños, hacer un seguimiento, mejorar el consumo de agua y gestionar las plagas gracias a sus cámaras.
Smartphones ultraseguros. Son vitales en la era de la comunicación vía celular. Son los teléfonos móviles que revelan la mínima cantidad de información de sus usuarios para que gobiernos y anunciantes no consigan sus datos.
Chips neuromórficos. Se trata de microprocesadores que actúan como cerebros para mejorar la inteligencia artificial de los dispositivos digitales y que posiblemente sustituirán a los chips tradicionales. Aunque no es la única tecnología relacionada con el cerebro.
El atlas del cerebro. El MIT ha señalado al proyecto Atlas del cerebro , un mapa de alta resolución que permite estudiar el cerebro humano con un detalle de hasta 20 micrómetros y en 3D, como uno de los resultados tecnológicos más revolucionarios. Esto permitirá a los neurocientíficos estudiarlo con la mayor precisión alcanzada hasta el momento.
Edición genómica. Es una increíble herramienta que tiene la capacidad de modificar el genoma para crear primates con mutaciones específicas y estudiar de otra manera los desórdenes cerebrales y otras enfermedades humanas. Su potencial parece ilimitado.
Robots ágiles.
Son aquellos autómatas con la capacidad de caminar y correr en terrenos irregulares, a los que otras máquinas con ruedas no pueden llegar. Uno de los ejemplos es Atlas, un robot humanoide creado por Boston Dynamics, una compañía que Google adquirió en 2013. Puede caminar a través de terrenos difíciles e incluso correr en terreno plano. Aunque robots anteriores como el ASIMO de Honda y el diminuto QRIO de Sony son capaces de caminar, no pueden ajustar rápidamente su equilibrio. Como resultado, a menudo resultan torpes y su valor práctico se ve limitado. Atlas, en cambio, tiene un excepcional equilibrio y puede estabilizarse con facilidad, demuestra el tipo de habilidades que necesitarán los robots para moverse por los entornos humanos de manera segura y sencilla.
Hardware de realidad virtual ‘Oculus rift’.
Según los expertos, “tiene calidad y precio para poder acceder al mercado de consumo”. Y, “traerá nuevas formas de entretenimiento para videojuegos y comunicación, como emergencias”. Es un software que va a ayudar a los dispositivos móviles a llevar a cabo tareas en equipo.
Microimpresión en 3D. Es capaz de producir tejidos biológicos, hasta, incluso, poder crear vasos sanguíneos u órganos artificiales.
Energías eólica y solar inteligentes. Completan la lista de tecnologías disruptivas de 2014. El MIT destaca dos conceptos: la cantidad de energía eólica ha aumentado más del doble desde 2009. Y la generación de energía solar está aproximadamente una década por detrás de la producción de energía eólica.