Las autoridades rusas han destacado que nadie ha resultado herido tras este suceso celestial, ya que se trataba de un pequeño meteoro. Aún así, la roca ha protagonizado un gran espectáculo, ya que su estallido se produjo en horas nocturnas, lo que ha permitido que su destello se viera con más fuerza que el ocurrido en 2013.
Debido a la costumbre rusa de llevar cámaras en los salpicaderos de los coches, un conductor ha grabado los hechos --como puede verse en este vídeo de YouTube. .
Gracias a este tipo de imágenes los científicos podrán estudiar con mayor detalle el objeto caído y podrán calcular dónde han acabado sus restos. Hay expertos que no descartan que se trate de la reentrada de un objeto de basura espacial.